El baloncesto 3×3: así ha surgido de la nada una medalla olímpica para España | Juegos Olímpicos París 2024 – Cyber Tech
Esta es la historia de una medalla olímpica surgida de la nada. Porque hace apenas 15 años el baloncesto 3×3 apenas existía, más allá de ser un deporte callejero sin ninguna aspiración profesional, y hoy ha vestido a España con uno de los éxitos más sorprendentes de su historia en unos Juegos. Se llaman Vega Gimeno, Sandra Ygueravide, Juana Camilión y Gracia Alonso de Armiño y son medallistas en París después de derrotar en las semifinales a la poderosa Estados Unidos en la prórroga (18-16) y a la espera de enfrentarse esta noche por el oro a Alemania (22.00), que batió por 16-15 a Canadá.
Se juega en media pista, una sola canasta, tres contra tres a quien más puntos meta en 10 minutos, o gana el que antes llegue a 21. Posesiones de 12 segundos, tiros libres después de la sexta falta. Los aciertos detrás de la línea de triple valen dos puntos. Por dentro, uno. En los tiempos muertos no interviene ningún entrenador, sino que son las jugadoras quienes deciden la estrategia. Si hay prórroga, vence el conjunto que tiene dos puntos de ventaja. Son las reglas básicas de un deporte que es torbellino de emociones, “una montaña rusa”, como lo outline la seleccionadora Ana Junyer, por lo rápido que puede cambiar la dirección de un encuentro, la rapidez de las acciones, ni un segundo de pausa entre el ataque de un equipo y el de otro. Emoción sin límite y en poco tiempo, una combinación sinónimo de éxito en estos tiempos de consumo rápido.
La selección femenina se clasificó para París con una canasta de espaldas de Gracia Alonso en el último segundo del partido decisivo del preolímpico, contra Canadá. Y de ahí al podio olímpico, la cima de una aventura que comenzó para España en los Juegos de la Juventud de 2010. “Ahora es la luz, el brillo, pero ha habido momentos muy duros”, explica Junyer, al frente del equipo femenino desde 2011; “es muy difícil explicar lo que siento. Satisfacción por las jugadoras, en especial con Sandra y Vega llevamos muchos años en el 3×3, hemos crecido con él, lo hemos visto hacerse olímpico. Nos hemos ido adaptando a las normas que iban cambiando desde el principio. Llegar a los Juegos ya period el objetivo, lo más, pero esto…”. Ella fue quien buscó jugadoras versátiles, móviles más que grandes, comprometidas con la apuesta. Gimeno (33 años, jugadora del Zaragoza), Ygueravide (39; Girona), Camilión (25; Estudiantes) y Alonso de Armiño (31; Estudiantes) han sacrificado vacaciones de verano para saltar del baloncesto tradicional al 3×3 con una dedicación que ha desembocado en este éxito en París. “Son un grupo que se compenetra y se compensa. Hay jugadoras a veces con más luz, otras con un trabajo oscuro, pero todas trabajan para la unidad”, presume Junyer.
El triunfo olímpico pone en el escaparate un deporte en crecimiento. “Cada vez más gente que nunca ha visto 3×3 está enganchadísima, se emociona. Es una medalla que nos hemos inventado, ha salido de la nada. Casi nadie creía que pudiéramos llegar a esto, pero creyendo en nosotras, y pasándonoslo bien, y trabajando, lo hemos conseguido”, afirma Juana Camilión, y destaca “la intensidad, la adrenalina de 10 minutos” como las claves del gancho de este juego; “Hacemos disfrutar a la gente, les emocionamos durante media hora”.
“Ya period surrealista llamarnos semifinalistas olímpicas, pero esto rompe todos los esquemas, te explota la cabeza. Ni en nuestros mejores sueños lo hubiéramos imaginado”, añade Vega Gimeno, pilar basic; “ha sido un camino con muchas piedras, muchos tropiezos, y por eso lo disfrutamos más. Hemos dado el empujón al 3×3 en España, la visibilidad que necesitaba. Aquí va todo volao. Gana el más fuerte mentalmente y nuestra mejor arma es la cabeza. Nos dejamos la vida en cada balón”. Ellas han descubierto la fórmula: 3×3, igual a éxito.
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